¿Puede ser el coaching nutricional la mejor opción para cambiar de hábitos alimenticios?
La diferencia fundamental entre el coaching y la nutrición clásica es el ENFOQUE. El Nutricionista trata pacientes y suele centrarse únicamente en el cuerpo y sus patologías como sobrepeso, diabetes etc. Por otro lado, la función del coach nutricional no es tratar patologías (eso solo debe hacerlo un Diplomado en Nutrición) sino que se enfoca más en las EMOCIONES que interviene en la adquisición y cambio de hábitos.
Un coach no es un “solucionador de problemas” es una persona que se ha formado para motivar, para enseñar técnicas que ayuden a alcanzar las metas que se quieren conseguir. En el caso del coaching nutricional es experto en ayudar a las personas a conseguir sus objetivos de cambio de hábitos alimenticios, pérdida de peso, a través de herramientas fundamentalmente motivacionales y de cambio de hábitos alimenticios.
A día de hoy ¿quién no sabe que beber abundante agua, practicar deporte, comer verduras, cocinar bajo en grasa y comidas poco procesadas etc. etc. puede ayudar a mejorar nuestra salud? El problema no es la creación de la DIETA PERFECTA (esa que no existe) para perder peso en un periodo de tiempo. El problema que nos encontramos la mayoría de “gordit@s con gafas” es que empezamos el lunes con muchas ganas de cambiar y puede que al día siguiente o ante la falta de resultados tangibles ya queramos abandonar. O que cuando conseguimos nuestro objetivo volvemos a adquirir esos “malos hábitos” que nos devuelven al punto de partida y en ocasiones tras DIETAS RESTRICTIVAS mucho más allá del peso con el que empezamos. Sabéis bien de lo que hablo… el famoso “efecto rebote”.
Por lo tanto “El mejor asesor nutricional no es aquel que diseña la mejor dieta, sino aquél que aun sabiendo diseñarla es capaz de conseguir que su cliente realmente pase a la acción y tenga la motivación suficiente para cambiar de hábitos”
¡ LAS «DIETAS» NO FUNCIONAN! Siempre que entendamos por dieta un plan cerrado y autoimpuesto el cual nos proporciona sensaciones y emociones negativas, o solo lo comprendemos como algo temporal. El principal problema de “las dietas” es que son restrictivas y no crean adherencia. Y esta última palabra es la más importante. Adherencia. ¡Si haces una dieta que no te ves siguiendo dentro de 6-8-12 meses, olvídate ni te molestes…fracasarás y lo sabes!
El punto de partida de un proceso de coaching es investigar todo aquello que impide que la persona hasta ese momento no haya podido alcanzar su objetivo y qué hábitos quiere cambiar. Se trata de un procedimiento muy personal donde la primera sesión es la más extensa y la más importante porque se tratará de averiguar a través de preguntas cuáles son esas acciones “auto-saboteadoras” que impiden al cliente o coachee a alcanzar sus objetivos.
Ejemplos de conductas auto-saboteadoras:
- Fabricar excusas que traten de olvidar, camuflar o nos impidan recordar lo importante que es para nosotros conseguir el cambio. Ejemplos: no tengo tiempo, es caro, ya he probado muchas dietas no creo que funcione, ya lo dejare para más adelante…
- Restar importancia a aquello que nos habíamos propuesto. Ejemplo: tampoco lo necesito tanto, ya me he resignado …
- Buscar la satisfacción en el corto plazo sin pensar en el largo plazo. Ejemplo: si no adelgazo 2 kg en una semana… ya abandono
- Crear emociones desagradables y negativas en torno a todo aquello que debemos hacer para conseguir el objetivo. Ejemplo: esto es súper difícil, es mucho sacrificio, no veo compensación, me estresa…
- Convencernos de que no somos capaces o que nuestras probabilidades de éxito son remotas, lo cual nos lleva a pensar que el trabajo que hay que llevar a cabo no merece la pena. Ejemplo: yo siempre he sido gord@, lo mío es herencia…
- Generar comportamientos incompatibles con mi meta. Ejemplo: pues total como no tengo fuerza de voluntad comeré dulces, ante mi situación de ansiedad y estrés comeré sin control, como me da pereza hacer deporte mejor veo una peli…
- HAY MUCHOS MAS ETC, pero mejor no extenderse y centrase en las SOLUCIONES.
Una vez entendidas y descubiertas las conductas auto-saboteadoras que nos impiden alcanzar nuestros objetivos , el coach ayudará al cliente a trazar un PLAN DE ACCIÓN consensuado, (NUNCA AUTOIMPUESTO) donde se establecerán las submetas, y acciones que nos acercarán a la consecución de los objetivos marcados.
Por lo tanto, los beneficios del coaching nutricional son todos aquellos que aporta un cambio de hábitos en su conjunto; y no me digáis que estos no pueden ser muchos:
- Pérdida de peso (sólo si es necesaria), pérdida de grasa corporal..
- Aumento de la autoestima, la autoimagen …
- Reeducación alimentaria
- Gestión y regulación de las emociones: HAMBRE EMOCIONAL vs hambre real
- Ahorro de dinero: basta ya de “productos milagro”, dietas milagro…
- Mejora de la salud
- Mejores condiciones a la hora de poner en marcha otros hábitos como la práctica de deporte (Agilidad, flexibilidad, confianza, superación personal)
- ETC. ETC.
Además, una vez que nos demostramos a nosotros mismos que somos capaces de cambiar hábitos y conseguir nuestros objetivos , nos veremos con la motivación necesaria para modificar otros aspectos de nuestra vida que puede que no nos gusten, nos incomoden o nos hagan infelices; de manera que los beneficios se encadenan para llegar a una situación de plenitud personal. Por ejemplo: mejoras en las relaciones de pareja, en el trabajo, en las relaciones familiares, … lo que tan famoso es hoy en día: salir de la ZONA DE CONFORT a través del pleno DESARROLLO PERSONAL.
Y tu.. ¿qué quieres cambiar? Y lo más importante ¿PARA QUE LO QUIERES LOGRAR?
Estaré súper interesada en leer tus opiniones y respuestas , podéis encontrarme de manera presencial en la ciudad de LEÓN o virtual en el 669278814 info@coachnutricionalvirginiamartinez.es o rellenando el siguiente formulario.
Un saludo LA GORDITA CON GAFAS = VIRGINIA MARTINEZ COACH NUTRICIONAL