Hasta ahora he tratado los aspectos más bien negativos que conlleva ser La gordita con gafas, pero también, como todo en esta vida, hay que buscar el lado bueno de las cosas y hoy me dispongo a contaros algunas ventajillas que puede tener ser una gordita con gafas:
- Siempre podrás usar la excusa de “yo soy muy grande, así que yo voy en el asiento delantero del coche que ocupo más “. Esto nunca falla, muy pocos se atreverán a cuestionarte y más si se trata de un coche pequeño de esos de 3 puertas, en el que tus acompañantes pensarán que solo de plegarte ya tienes que tomarte una Biodramina.
- Siempre serás el que más coma en una reunión familiar, cena con amigos etc., da igual con quien estés comiendo que siempre considerarán que has comido poco. Un ejemplo muy claro suele ocurrir en casa de las abuelas, desde el momento que entras por la puerta después del achuchón y los dos besos viene él: “¡Ay hija pero que gorda estás!, ¡tienes que adelgazar ya!”. Eso sí luego es sentarte a la mesa y ya vienen los: “¿solo comes eso? ¿no te quedarás con hambre? ¡come más tarta hija, que ha he hecho yo y no engorda! (no, si la tarta no va a engordar más, pero tú sí y lo sabes).
- Cuando viajas a otros países y descubres otras culturas se puede abrir ante ti un nuevo mundo “el paraíso de las gorditas con gafas”… Aunque no os lo creáis hay países en el que tus amigas las “tías buenas macizorras” pasarán a ser invisibles porque los Cubanos, Marroquíes, Brasileños, Egipcios… y a saber cuáles más (tampoco he viajado tanto) se morirán por tus curvas e incluso en muchos casos pensarán que llevas tatuado el signo del dólar $ en la espalda y te tratarán como a una reina allá donde vayas. En mi caso personal, he llegado a sentir verdadero agobio al pensar en la cantidad de camellos que darían a mis padres por mí, ¿qué harían con tanto camello junto en una ciudad como León?
- Tú, salvo excepciones (muy borde tienes que ser) siempre serás “LA SIMPATICA “. El sentido del humor es tu baza más fuerte, porque debes aprender a reírte de ti misma y a pensar “que lo que opinen los demás está de más” (como diría Mecano). Y si luego tienes la suerte de contar un par de chistes graciosos con un poco de salero, ya te has ganado al público y serás seguramente, más recordada que la rubia exuberante que no se ríe, por miedo a si se le ven los empastes o se le mueve el gloss.
Recuerda “La belleza sin gracia es como un anzuelo sin cebo”, esto fue lo que dijo Ninon de Lencios una cortesana francesa del siglo XVI, y que queréis que os diga (los psicólogos, una amiga, tu madre…) te podrán decir lo que quieran, pero una cortesana por aquel entonces de esto sí que sabía.
Bueno, y ya para finalizar me gustaría recordar, que en mi nuevo cambio de vida y transformación, no solo ha sido física sino también profesional. Ahora soy coach nutricional así que si alguno de los que me estáis leyendo os sentís identificados o conocéis a alguien al que pueda ayudar, no dudéis en contactar con esta @gorditacongafas (mi twitter) o por email lagorditacongafas05@gmail.com porque “La belleza es un estado de ánimo (Emile Zola, novelista francesa 1804-1901) y hay que animarse porque todos sabemos el súper tópico de “la belleza está en el interior” y en algunos casos algunas tenemos un páncreas divino jeje
Ríanse, cuídense por dentro y por fuera y sean felices.
Saludos de La gordita con gafas